Tres cosas con las que
Allah esta Complacido
Mudhakkirah al-Hadith an-Nabawi.
Por
Rabi Bin Hadi Umayr al-Madkhali.
Traducido del árabe al inglés por: Abu Nasir
Abid Zargar.
Traducido del inglés al español por: Mussa Abdullah
Reyes.
Tomado de: www.salafipublications.com
Id del Articulo: SCL100009-tr
De Abu Huraira (RA), que el Mensajero
de Alláh (SAW) dijo:
“Verdaderamente Alláh está complacido con tres
cosas por ustedes y Él está disgustado con tres cosas por ustedes. Él está
complacido que ustedes lo adoren a Él y no asocien nada con Él; y que ustedes se
aferren a la Cuerda de Alláh juntos y no se dividan y que ustedes adviertan a
aquellos quienes Alláh ha puesto a cargo de ustedes. Y Él está disgustado con
tres cosas de ustedes: platica vana; preguntas excesivas y el gasto de la
riqueza”.
Reportado por Muslim[1], Malik[2] y Ahmad[3].
El
Reportador del Hadith.
Abu Huraira ad-Dawsi, el eminente Compañero, el
Hafid entre los Compañeros.
Hay diferencia de opiniones acerca de su
nombre, algunos dicen Abdur Rahman bin Shakar y algunos dicen bin Ghanam y otros
dicen otro, pero la mayoría de los escolares acordaron con el primer nombre.
Murió en el año 59 H.
El significado del Hadith.
Este Hadith
contiene grandes líneas de guía profética:
La primera: El énfasis sobre
el Tawhid puro y el establecimiento del más grande de los derechos de Alláh, la
más grande de las obligaciones del Islam, lo cual es el singularizar a Alláh
solo para la adoración y ello es todo el propósito detrás de la creación de los
genios y de la humanidad.
Él, el más Alto
dice:
“Y no he creado a los genios y a los
hombres sino para que me adoren” (51:56).
Y ello comprender quedarse lejos del
Shirk en su adoración, por lo tanto, no hay socio para Alláh de (entre) Su
creación quien sea hecho un rival para Alláh en la suplicación, buscando ayuda,
sacrificio, jurando, esperando, temiendo y en creer. Esto es porque estos
asuntos son puramente el derecho de Alláh. Él no está complacido que un ángel
traído cerca o un Profeta enviado como mensajero compartiera cualquiera de estos
asuntos con Él.
La Segunda: Aferrarse a la cuerda de
Alláh. Esto es con lo cual el Mensajero de Alláh (SAW) vino, comprendiendo el
Libro y la Sunnah, incluyendo las enseñanzas del Mensajero de las creencias,
adoración, maneras y transacciones comunes.
Así que no es permisible
para un musulmán individual, o un grupo musulmán, o una sociedad islámica, el
gobernante o el gobernado, el abandonar cualquiera de los fundamentos o ramas
del Islam. Más bien, es obligatorio sobre todos los que tienen Imán y perfecta
adherencia a lo cual el Sello de los Profetas y el Jefe de los Mensajeros trajo,
y darle la precedencia por encima de todo otro discurso o guía.
Esto
comprende juzgar por lo que el Mensajero trajo en cada asunto y singularizando
al Mensajero de Alláh por la obediencia y siguiéndolo en los menores y mayores
asuntos del Din. Los rangos de todos los musulmanes solamente serán reunidos por
evitar cada innovación, opinión o desobediencia y no por otras cosas que esto, y
ellos establecerán su deseada unidad y entonces ellos verdaderamente se
aferrarán a la Cuerda de Alláh. Esta es la situación la cual Alláh desea y con
la cual Él ha confiado a la Ummah Islámica y no a través de grupos políticos con
sus diferentes creencias, puntos de referencia y orientaciones. Porque
verdaderamente este tipo de asamblea, si está formado, y eso es improbable,
entonces lo siguiente se aplicaría a ello:
“Los crees unidos, pero sus corazones
están separados” (59:14).
La Tercera: Advertir a los gobernantes
es logrado por cooperar y obedecerlos sobre la verdad y su orden de ello (la
verdad). Ello incluye aconsejarlos y recordándoles de ser gentiles y amigables y
notificarles de lo que son negligentes y lo cual no han logrado respecto de los
derechos de los musulmanes.
También incluye no hacer revueltas
contra ellos, rezar detrás de ellos, ir al Yihad junto con ellos y pagarles el
Zakat. Tanto como abandonar las revueltas contra ellos con la espada cuando las
malas relaciones o la injusticia aparezcan de ellos; y que ellos no desvíen con
falso elogio; y suplicar por su rectificación.
La Cuarta: la prohibición de la plática
vana. Porque ello es discusión o falsedad, circulación de la perversión y
difusión de los rumores y falsa información, y ello es suficiente para que una
persona sea considerada como un mentiroso, que él narra todo lo que
oye.
Y similarmente, ir profundamente en
asuntos hipotéticos, los cuales no han ocurrido y respondiéndolos antes de que
ocurran, porque verdaderamente esto distrae a los musulmanes de estudiar el
Libro y la Sunnah y los preocupa de memorizar y entender los
textos.
La Quinta: la prohibición del preguntar
excesivo y ello incluye preguntar a la gente por sus posesiones, tales como la
riqueza, etc. y cargarlos con necesidades. Esto no es propio para un musulmán,
para quien Alláh desea que él se convierta en grande y noble. Así que preguntar
a la gente es prohibido como un principio, y no es permitido excepto en ciertas
circunstancias; y respecto a pedir de la creación hay tres
perversiones:
1) Perversión de pedir a otro que a
Alláh, y es un tipo de Shirk.
2) Perversión de dañar a la creación,
por ejemplo, alguien a quien es pedido de este modo, ello es un tipo de opresión
de la creación.
3) Perversión de mostrar humildad otro
que a Alláh y ello es opresión del alma.
Esto aplica cuando aquel a
quien es preguntado está vivo y capaz de actualizar la pregunta, la cual es
buscada de él, así como pedir al muerto y al ausente por aquellas cosas las
cuales solamente Alláh es capaz de garantizar. Verdaderamente eso es la esencia
del Shirk con Alláh.
Similarmente, esta prohibición incluye
las excesivas preguntas técnicas especialmente aquellas cuyo propósito es la
obstinación y la estimulación a la disputa y la argumentación en la falsedad y
hurgar en asuntos hipotéticos los cuales no han ocurrido y buscar respuestas
para ellos.
La Sexta: La prohibición de gastar la
riqueza. Porque verdaderamente la riqueza es una bendición de Alláh y es el
nervio de la vida, como ellos dicen. La riqueza contiene una ayuda para la
obediencia a Alláh y el Yihad en su camino y un socorro para ayudar a los
musulmanes pobres merecedores, parientes y otros.
Así que es obligatorio para un musulmán
agradecer a su Señor por esta bendición y protegerla contra el gasto y la
negligencia y no gastarla, excepto en las vías que Alláh ha legislado y
permitido. No es permisible para él gastarlo en la vía del Shaytán y la
desobediencia, justo como no es permisible para él ser negligente con esta
bendición y someterla al dispendio.
Beneficios del
Hadith.
1) La obligación de establecer la
adoración de Alláh en la manera deseada.
2) La obligación de quedarse lejos de
cada tipo de Shirk, mayor y menor.
3) La obligación de aferrarse a la
Cuerda de Alláh la cual es Al-Islam, aquella que Muhammad trajo en el Libro y la
Sunnah, en cada asunto,
4) La prohibición de dividir y la
obligación de unir a los musulmanes sobre la verdad.
5) La obligación de advertir a los
gobernantes musulmanes y cooperar con ellos sobre la verdad y la
rectitud.
6) La prohibición de la plática
vana.
7) La prohibición de pedir a la
creación, excepto en lo cual ellos sean capaces de hacer en tiempos de
necesidad. De cualquier forma, es mejor tener fe y
paciencia.
8) La prohibición de gastar la
riqueza.
[1] Hadith no. 115
(3/1340)
[2] Al Muwatta, hadith no. 20 (2/990)
[3] Vol. 2, p.
367.