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 | | Tema: 33-Libro-Hayy_Umrah // El inicio del tiempo de Tauaf al Ifadah Dom Dic 07, 2008 6:08 am | |
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El inicio del tiempo de Tauaf al Ifadah:
El tiempo para cumplir este Tauaf comienza cuando ha pasado la mayor parte de la noche previa al día décimo, si se ha cumplido con el rito de
permanecer en Árafat, aunque la Sunnah es realizarlo durante el día. Es posible
postergarlo pero nunca para después del mes de Dul Hiyya, excepto que exista una
excusa válida.
Una vez terminado este rito volverá a Mina para realizar el Duhr y
permanecer allí el resto del día del Eid y los tres días siguientes con sus
noches (Aiiam at Tashriq). Permanecerá en Mina, entonces, las noches de los dias
once, doce y trece de Dul Hiyya, y esto es lo mejor. Si el peregrino no puede
pasar la noche completa en Mina, deberá permanecer allí la mayor parte de la
noche, al principio, al medio o al final de la misma. Los cinco rezos diarios se
rezarán en congregación, cada uno en su tiempo prescrito pero abreviados
(Qasr), y de ser posible en la Mezquita al Jif, o de lo contrario en cualquier
otro lugar de Mina. En cada uno de estos tres días lanzará siete piedrecitas a
cada monolito después del cenit. Las piedrecitas las recogerá de cualquier lugar
de Mina.
La Sunnah es dirigirse caminando hasta los Yamarat, si es posible. El día once lanzará primero siete piedritas después del cenit al monolito denominado al
Yamrah as Sugra (el monolito pequeño) que está después de la mezquita de Al Jif.
Deberá lanzarlas con la mano derecha, unas tras otra, pronunciando el Takbir en
cada lanzada y con su rostro orientado hacia la Quiblah, de ser posible. Al
finalizar se alejará un poco hacia su derecha y orientado hacia la Quiblah
invocará a Allah elevando sus manos por el tiempo que le tomaría recitar Surah
”la Vaca”.
Luego se dirigirá al Yamrah al Usta (el monolito mediano) y lanzará allí siete piedritas también, lo hará con la mano derecha y pronunciará el takbir en
cada lanzada, como mencionamos anteriormente. Luego se alejará un poco hacia su
izquierda y orientado hacia la Quiblah invocará a Allah elevando sus manos por
un tiempo largo pero menor que la primera vez.
Finalmente se dirigirá a Yamrah al ‘Aqabah y le lanzará siete piedritas, posesionándose de forma tal que la Meca quede a su izquierda y Mina a su
derecha. En esta ocasión, no se detendrá luego de arrojar las piedras a invocar
a Allah con una Duah. Con esto habrá lanzado veintiun piedritas. La persona que
tiene una excusa valida puede omitir pasar la noche en Mina, y además puede
juntar el lanzamiento de piedras de dos dias en uno sólo, posponer todos los
lanzamientos hasta el último día o realizarlo por la
noche.
El día doce del mes repetirá lo mismo que hizo el día once: lanzar las piedritas a los tres Yamarat después del cenit como mencionamos.
Si solo desea quedarse en Mina dos días y no tres, deberá salir de Mina antes del ocaso del día doce. Si permanece hasta el día trece, lanzará las
veintiun piedritas a los tres Yamarat después del cenit. Esto es lo mejor, pues
el Profeta salla Allah alaihi wa sallam así lo hizo. La mujer hará lo mismo que
el hombre en todos estos ritos, con estos finalizan los ritos del
Hayy.
El Profeta salla Allah alaihi wa sallam realizó un solo Hayy, que es
conocido como Hiyyah al Uada’ (peregrinación de despedida). En ese Hayy, él
cumplió con todos los ritos, llamó a la adoración de Allah y encomendó a su
nación la responsabilidad de difundir el monoteísmo e invitar a los hombres a la
religión de Allah. En ‘Arafat se perfeccionó la religión del Islam y el día
diez (Iam a Nahr) se le encomendó a la nación musulmana la responsabilidad de
practicar y difundir el Islam. El Profeta salla Allah alaihi wa sallam
dijo ese día: “Que el hoy presente comunique al ausente”.
Bujari 67 y Muslim 1679
El musulmán debe invocar a Allah cada vez que termina un rito de
adoración como el Salat, el ayuno o el Hayy, pues Allah es en realidad quien le
ha dado éxito en tal acto de obediencia. Por ello debe alabarse por haberle
facilitado los medios para cumplir con esa obligación y pedirle perdón por
toda falta o imperfección que haya cometido en su realización. El musulmán no
debe ser como aquellos que consideran su adoración perfecta y se vanaglorian
de ella ante su Señor. Allah dice: “Y cuando hayáis terminado
con los ritos que debéis realizar (el Día del Sacrificio) recordad a Allah como
recordáis a vuestros padres , y más aún…” (2:
200).
Luego de lanzar las piedritas el día trece después del cenit, saldrá de Mina. La Sunnah es que se dirija a la zona de Al Abtah, si no hay dificultad,
rece allí el Duhr, el Asr, el Magrib y el Isha, y pase parte de la noche en ese
lugar.
Luego se dirigirá hacia la Meca y realizará el Tauaf de despedida (Tauaf al Uada) si no es de los que residen en esa ciudad. La mujer que está
menstruando o atravesando el puerperio no debe hacer el Tauaf . Después de esto
el peregrino está listo para abandonar la Meca y volver a su país, llevando la
cantidad de agua Zamzam que desee.
Libro Jurisprudencia Islámica.
Muhammad ibn Ibrahim
al-Tuwaijri. |
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